Las infecciones oculares tienen lugar cuando microorganismos dañinos como bacterias, hongos y virus invaden cualquier parte del globo ocular o un área adyacente. Esto incluye la superficie anterior transparente del ojo (córnea) y la membrana delgada y húmeda que recubre la parte exterior del ojo y el interior de los párpados (conjuntiva).
Síntomas de la infección ocular
- Enrojecimiento de ojos
- Dolor
- Secreción del ojo
- Ojos llorosos
- Sequedad ocular
- Sensibilidad a la luz
- Hinchazón de ojos
- Hinchazón alrededor de los ojos
- Picazón
- Visión borrosa
Siempre que usted sospeche que ha contraído una infección ocular, debe visitar a su profesional de la visión para someterse a examen ocular. Tratar de autodiagnosticarse puede retrasar el tratamiento eficaz y ocasionar potenciales daños a su vista.
Si utiliza lentes de contacto, deberá usar solo gafas hasta que haya visitado al profesional de la visión para obtener un diagnóstico y un tratamiento.
Existen muchos tipos de infecciones oculares, y el profesional de la visión necesita determinar el tipo particular de infección ocular que usted tiene, a fin de indicar el tratamiento correcto.
Causas y tipos de infecciones oculares
Conjuntivitis
La conjuntivitis, es una infección ocular común, altamente contagiosa, que habitualmente se propaga entre los niños en las guarderías, salones de clase y entornos similares. Los funcionarios y docentes de las guarderías también enfrentan mayor riesgo de contraer conjuntivitis cuando trabajan en instalaciones cerradas con niños pequeños. Los tipos de conjuntivitis infecciosos comunes frecuentemente tienen su origen en virus o bacterias. Los recién nacidos también pueden contraer infecciones oculares (conjuntivitis gonocócica y clamidial)
Queratitis viral
Además de la conjuntivitis común, existen otras infecciones oculares virales como el herpes ocular, que tiene lugar por exposición al virus Herpes simplex.
Queratitis micótica
Este tipo de infección ocular fue noticia en todo el mundo en 2006, cuando una solución para lentes de contacto actualmente retirada del mercado se relacionó con un brote entre los usuarios de lentes de contacto.
La infección ocular micótica se asoció con los hongos Fusarium, habitualmente encontrado en la materia orgánica. Este y otros hongos pueden invadir el ojo de otras formas, como a través de una lesión penetrante causada por la rama de un árbol.
Queratitis por acanthamoeba
Los usuarios de lentes de contacto se encuentran ante un riesgo mayor de enfrentar parásitos que pueden invadir el ojo y causar una grave infección que constituye una amenaza para la vista, llamada Queratitis por acanthamoeba. Por esta razón los usuarios de lentes de contacto deben seguir determinados consejos de seguridad.
Si usted usa los lentes de contacto al nadar o se relaja en un baño de inmersión, asegúrese de quitarse y desinfectar los lentes inmediatamente después.
En general, existe un mayor riesgo de infecciones oculares bacterianas y micóticas entre los usuarios de lentes de contacto, y debe respetarse el correcto cuidado de los mismos.
Tracoma
Es una infección ocular relacionada con la Chlamydia trachomatis, y constituye una causa fundamental de la ceguera. Las moscas pueden diseminar la infección en entornos insalubres, y la repetición de la infección es un problema común.
La tracoma en general infecta el interior del párpado, que comienza a cicatrizarse. Luego, las cicatrices causan un doblez del párpado, y las pestañas comienzan a rozar el tejido de la córnea y destruirlo, y el resultado es ceguera permanente.
Una buena higiene y el acceso a tratamientos como los antibióticos orales son esenciales para controlar la tracoma.
Endoftalmitis
Cuando una infección penetra en el interior del ojo, como en el caso de la endoftalmitis bacteriana, la consecuencia de no contar con un tratamiento, en general con antibióticos potentes, podría ser la ceguera. Este tipo de infección puede aparecer con una lesión ocular penetrante o como una complicación de una cirugía de cataratas.
Complicaciones con las infecciones oculares
Una infección también puede afectar partes internas de los párpados superior e inferior, lo que crea un orzuelo o chalación.
Cuando la infección invade las glándulas lacrimales, es posible que se presenten trastornos inflamatorios tales como dacrioestenosis y uveitis. Asimismo, la infección puede conducir a una inflamación y bloqueo del sistema de drenaje lacrimal del ojo y causar dacriocistitis.
La infección puede ser una causa subyacente de una úlcera corneal, que se parece a un absceso en el ojo. Si no se la trata, la úlcera corneal puede llevar a una grave pérdida de visión.
Tratamientos para la infección ocular
Afortunadamente, la mayoría de las infecciones oculares bacterianas desaparecen, especialmente con un tratamiento inmediato, como gotas oftálmicas antibióticas con receta médica o ungüentos y compresas.
En casos de infecciones oculares virales, es posible que se le recete gotas oftálmicas antivirales. Estas requieren una cuidadosa administración para reducir la inflamación relacionada.
Si los síntomas empeoran o cambian, póngase en contacto con el profesional de la visión inmediatamente.
Cómo evitar las infecciones oculares
Si se encuentra cerca de una persona con ojos enrojecidos, evite tocar sus propios ojos hasta que primeramente se lave las manos. El uso abundante de aerosoles y soluciones de limpieza antiinfecciosas en áreas públicas, como guarderías y salones de clase, puede reducir la posibilidad de contraer infecciones oculares virales o bacterianas comunes.
Evite infecciones oculares lavándose las manos antes de tocar sus ojos o párpados y antes de manipular los lentes de contacto.
En su casa, si algún miembro de la familia tiene ojos enrojecidos o una infección ocular confirmada, mantenga limpia la ropa de cama y toallas que él o ella usa, y no permita que comparta estos artículos con nadie. Asegúrese que se laven las manos con frecuencia.
Y en general, enseñe a los niños a que eviten tocar sus ojos sin antes lavarse las manos.
Si usted es usuario de lentes de contacto, debe seguir los consejos de seguridad sobre una higiene apropiada, como lavarse las manos antes de manipularlos.
Asimismo, tenga en cuenta que dormir usando los lentes de contacto, aumenta el riesgo de infección ocular.